martes, 11 de mayo de 2010

La via del guerrero no entiende de desigualdades

A menudo, muchos practicantes de los denominados "deportes de contacto" o de artes marciales predican, por falsa creencia popular, que el genero femenino no está capacitado para estar al mismo nivel que el de su contrario masculino. Nada más lejos de la realidad, antiguos registros nos cuentan de mujeres luchando ferozmente en el campo de batalla, o alcanzando cotas jamás pensadas para cualquier ser humano dentro de las proezas del mundo marcial. Éste articulo pretende ser tanto un homenaje para todas aquellas mujeres que lucharon por ser consideradas iguales, como un repaso a la historia de las artes marciales con la mujer desde el principal punto de referencia.

Se conoce que entre todas las artes marciales el Kung Fu es considerado "el abuelo" de todas por ser el precedente de muchos de los estilos y sistemas modernos de artes marciales (aun a pesar de tenerse constancia de la existencia de artes hindues o mesopotamicos contemporaneos al mismo). Muchos pueden considerar la sociedad china como machista en muchos aspectos, sin embrago en el kung fu las mujeres podían demostrar sus habilidades y su coraje independientemente de su genero. Aunque existen muchos casos ilustrados un buen ejemplo de esto suponenen dos luchadoras en concreto: La princesa Ming Liang y Yim Wing Chun.

La Princesa Ming Liang es considerada la primera mujer en ser monja oficial dentro del famoso templo de Shaolin. Liang era una princesa cuya historia recuerda al origen de Buda pues, como él, viví recluida en su palacio dónde no lo era permitido salir ya que debía ser ajena al dolor y la pobreza del mundo. Pero esta princesa se fugó alcanzando, depués de muchas aventuras y desventuras, el templo de Shaolin recien construido. Una vez allí tuvo el privilegio de ser una de los primeros doce almunos de Bodhidharma, el cual fue encargado de traer los preceptos del budismo desde la Inidia hasta China para establecer alli lo que hoy en día se conoce como Budismo Chan o Budismo Zen (analogia utilizada en regiones más propias como Japón). Debido a que era una mujer y por razones monasticas no se le permitía vivir dentro de las dependencias masculinas det templo, sin embargo si se le permitió vivir en las cercanias de Shaolin, donde estableció la primera escuela femenina de Budismo Chan y artes marciales chinas. Posteriormente, cuando esta murió, se alzó una pagoda en su honor cerca del monasterio y finalmente se estableció el primer templo shaolin exclusivamente femenino construido por el hermano de la princesa Yung Tai, gran guerrera y luchadora., del cual nacieron verdaderas leyendas del Kung Fu.

Yim Wing Chun fue la fundadora del sistema Wing Chun Kung Fu, mundialmente conocido por Bruce Lee y su difusión , la señorita Yim Wing Chun era nativa de Canton (Provincia de kwongtong) en China. Era una joven inteligente y atlética, honesta y directa. Su madre había fallecido poco tiempo después de su compromiso con Leung Bok Chou, un mercader de sales de Fukien. Su padre, Yim Yee, fue injustamente acusado del crimen y huyó para luego reencontrarse con ella e instalarse al pie de la montaña Tai Leung (en la fronera de Junan y Sechuan), donde se ganaron la vida como vendedores de pastas de judias. Con el tiempo, Yim Wing Chun conoció a Ng Mui, conocida por ser uno de los 5 grandes de Shaolin. Fuerte y habilidosa Ng Mui fue una de las primeras guerreras en idear un estilo propio de combate y adquirir el titulo de grande de shaolin como monja.

A los 15 años, como era tradición en China, Yim Wing Chun usaba su pelo atado en señal de que estaba lista para casarse, su belleza pronto atrajo la atención de un hombre local que intentó forzar al matrimonio a la joven a tal punto que ella y su padre temieron por su seguridad debido a sus amenazas. Ng Mui, al enterarse de la situación aceptó enseñar técnicas de combate a Wing Chun para que ella pudiera defenderse. Ambas se dirigieron a la montaña donde entrenaron incansablemente hasta que Wing Chun dominó el sistema de combate. A su regreso al pueblo desafió al hombre a un combate y lo derrotó.

Ng Mui partió luego para viajar por el país dejándole a Wing Chun el honor de honrar las tradiciones del Kung Fu continuando el desarrollo del sistema incluso luego de casada, y que apoyara a cualquiera que trabajara para derrocar al gobierno Manchú y restaurar a la dinastía Ming al poder. Así fue como finalmente, después de años de desarrollo y arduo entrenamiento estableció el sistema de combate hoy conocido como Wing Chun Kung Fu.

Dentro del mundo de las artes marciales japonesas también se sabe de casos documentados en los que la mujer ha sido vista como heroina y guerrera.

Debido a que la sociedad tradicional japonesa se basaba (y aun actualmente conserva algunos de esos vestijios) en un sistema de castas, las mujeres podian nacer dentro del seno de una familia samurai y ser consideradas como tal.

Crónicas de guerra nos cuentan sobre mujeres de samurais que en defensa de sus hogares empuñaban armas y hasta acompañaban a sus maridos a los campos de batalla. Esto demuestra que poseían sagacidad y coraje. Hay registros de una mujer guerrera llamada Tomoe Udosen, era especialmente diestra en el uso del arco y la flecha e incluso iba a batalla con su propia armadura (Yoroi).

A pesar de todo esto las mujeres japonesas no perdían sus cualidades femeninas, prestaban mucho cuidado a su apariencia, gustaban de usar su cabello perfectamente arreglado y su piel clara por medio de tratamientos con polvos y cosméticos. Vestían con lujo y hermosos kimonos coloridos de fina seda. Como podemos ver no solo eran las encargadas del mantenimiento de las tareas del hogar sino también valerosas mujeres capaces de enfrentarse a un batallón.

Se cree que las mujeres del bushi (o samurai en la batalla) estaban principalmente especializadas en el uso de la naginata debido a su versatilidad contra todo tipo de enemigos y armas, y también, en consideración a las situaciones en que ellas tendrían que defenderse más probablemente. Se dice que las mujeres, generalmente hablando, defendían sus casas en lugar de ir a la guerra, por lo que era importante adquirir experiencia en el uso de armas que ofrecían un mejor rango de tácticas para defenderse contra merodeadores que a menudo atacaban a caballo. Sin embargo en muchas ocasiones eran llamadas al campo de batalla dónde su experiencia y táctica militar eran muy valoradas. Por consiguiente, se cree que las mujeres a veces eran adeptas a la arquería, por el efecto a largo alcance, y a menudo con la naginata que era un arma eficaz contra jinetes a caballo en distancias medias.



Una mujer fuerte, elástica, armada con una naginata, podría enfrentar a cualquier guerrero a una distancia dónde las ventajas de fuerza, peso, o espada contaban muy poco.

Del siglo X en adelante, puede decirse que Japón nunca ha estado en paz, pero en 1467, el país entero cayó en un caos, en lo que fue conocido como Sengoku Jidai ( Período de Guerras entre Estados - 1467 a 1568). Éste fue un período en el que todas las clases sociales fueron arrastradas a la guerra, y a veces los dominios feudales quedaron casi despojados de hombres saludables que, o fueron muertos en batalla, o contratados hacia fuera como nobushi (mercenarios), o reclutados en los ejércitos.Un resultado de esta guerra desenfrenada fue que las mujeres quedaron a menudo como la última defensa de pueblos y castillos. Es probablemente en este momento que se genera la imagen de mujeres guerreras con naginata (Onna Musha) ataviadas, incluso, con armadura.
Con el advenimiento del Período Edo (1603 – 1867) se origina una paz forzada, bajo las autoritarias reglas del Shogun Tokugawa.Toda la clase samurai quedó limitada bajo un intrincado código de conducta, el Bushido, éstas leyes se extendieron luego a todos los niveles de la sociedad.La clase guerrera fue llevada a un nuevo papel de burócratas gobernantes y agentes de policía, dando fuerza a una paz totalitaria. El rígido código de sacrificio, honor y lealtad se convirtió en un ideal por todos a emular.
Las mujeres entrenaron con la naginata, más para consustanciarse con las virtudes idealizadas por ser esposas de samurai, que con el propósito del combate. Cuando la mujer de un bushi se casaba, una de las posesiones que llevaba a la casa de su marido era la naginata. Como el daisho (las espadas larga y corta) que su marido ostentaba, la naginata fue considerada un emblema de su papel en la sociedad. En este Período, se crearon muchas escuelas (Ryuha) especializadas en su uso y varias de éstas fueron asociadas cada vez más con las mujeres. Sus prácticas se realizaban con réplicas de madera y fueron englobadas dentro de las muchas tradiciones marciales.La práctica de Naginata Do se realiza hasta el presente, incluso en la faz deportiva y competitiva.
En caso de verse en una situación de peligro de muerte no era inusual que se suicidaran. Esto lo hacían con un pequeño puñal llamado Kaiken que portaban entre los pliegues de su kimono. De tener tiempo antes de llevar a cabo tan drástica decisión, se ataban los pies a la altura de los tobillos para no quedar en una posición indecente al caer muertas. Luego apoyaba el puñal en su garganta y con un rápido movimiento cortaban la yugular. Esto hace que la sangre deje de fluir al cerebro produciendo una rápida inconsciencia y la muerte cerebral.
Como podemos ver a diferencia de la forma de suicidio Seppuku, mas conocido como Hara-Kiri en occidente, este ritual llamado Jigaki no es tan doloroso y sangriento pero no por ello menos heroico.Tal como el samurai servia a su Daimyo (señor feudal), la mujer servia a su marido siendo fiel y compenetrándose en sus funciones tanto en la paz como en la guerra.
Existen cientos de casos en los cuales las mujeres no solo han tenido un papel destacado en la historia como artistas marciales, sino que además se han convertido en leyenda. La definición biologica que a muchos sirve como excusa de limitación de genero ha servido como excusa pues muchos atribuyen a estos artes cualidades tales como la fuerza bruta. Sin embargo practicantes de todo el mundo con experiencia suficiente como para dar su opinión desde un punto de vista objetivo coinciden en el hecho de que la mujer es un ejemplo tanto en su espiritu de lucha como en el elenco de habilidades capaces de desplegar tanto en combate como en entrenamiento. La elasticidad, la resistencia espiritual, el dominio por la habilidad y no por la fuerza bruta, el control de su centro y su cadera y la fuerza y el coraje del alma són grandes ejemplos que deberían residir en todo artista marcial independientemente de su genero y sin duda, residen en muchas mujeres que ni tan siquiera se atreven en dar ese primer paso.

La esencia de las artes marciales decidió desde el principio residir en el corazón y el espiritu del ser humano, no en el de un hombre y una mujer.
Fundador de la Academia para el estudio de las Artes Marciales kwoon Ryû.

2 comentarios:

  1. Si quieres puedes hacerlo. Mujer, hombre, eso no importa en el mundo del Budo. ¿Por que si de verdad lo quieres no lo haces? ¿Por que si de verdad lo quieres sientes pereza de emprender este camino? ¿Por que si de verdad lo quieres te avergüenzas de desearlo? ¿Por que si de verdad lo quieres no empiezas ahora mismo? ¿Que te lo impide?

    Phoenix.

    ResponderEliminar
  2. Gran escrito ;) como siempre Germán, me dejas sin palabras cuando leo algo que sale de ti, y deverdad, que me ha gustado mucho y es muy interesante. Sigue asi y conseguiras todos tus propositos ;) LO SE!!!!

    Susana

    ResponderEliminar